Gaur egungo antropologiaren inguruko ikerketek adierazten dutenez, gizakia beste animaliengandik bereizten duten zenbait elementuren artean sormena, abstrakzioa eta irudimena bezalako gaitasunak dira. Horiek guzti horiek dira, hain zuzen ere, arte deitu izan den ekimenaren jatorrizko tresna batzuk.
Nire helburua blog honetan ikasle eta irakasleentzat materiala ipintea da; denon artean euskeraz dagoena gehitzeko, eta ez dagoena beste hizkuntzetan ikusi gero egokitzeko.
Juan Ramón Jiménez nació en Morgue (Huelva), en 1887 se mudó con sus padres a una antigua casa, y empezó sus estudios, alcanzando Segunda Enseñanza, equivalente a Bachillerato. Más tarde, se muda a Sevilla, donde comienza su carrera de Derecho, que poco después dejó para empezar sus primeros trabajos, en prosa y verso. En 1900 cambió su residencia a Madrid y conoció a Rubén Darío, también publicó sus primeras obras, "Ninfeas y Alma de violeta". Padeció graves depresiones a lo largo de su vida, debido a la muerte de su padre ese mismo año, y a su personalidad soñadora y algo neurótica, pero aun así siguió escribiendo. En 1916 se casó con su novia, Zenobia, en Nueva York. Cuando estalló la guerra civil en 1936 en España tuvo que emigrar a estados unidos. En 1956, le fue concedido el Premio Nobel. El poeta murió dos años después de este premio, en Puerto Rico.
Adolescencia
En el balcón, un instante nos quedamos los dos solos. Desde la dulce mañana de aquel día, éramos novios. El paisaje soñoliento dormía sus vagos tonos, bajo el cielo gris y rosa del crepúsculo de otoño. Le dije que iba a besarla; bajó, serena, los ojos y me ofreció sus mejillas, como quien pierde un tesoro. Caían las hojas muertas, en el jardín silencioso, y en el aire erraba aún un perfume de heliotropos.
No se atrevía a mirarme; le dije que éramos novios, …y las lágrimas rodaron de sus ojos melancólicos.
Ante la sombra virgen
Siempre yo penetrándote, pero tú siempre virgen, sombra; como aquel día en que primero vine llamando a tu secreto, cargado de afán libre.
¡Virgen oscura y plena, pasada de hondos iris que apenas se ven; toda negra, con las sublimes estrellas, que no llegan (arriba) a descubrirte!
La muerte bella
¿Que me vas a doler, muerte? ¿Es que no duele la vida? ¿Porqué he de ser más osado para el vivir esterior que para el hondo morir?
La tierra ¿qué es que no el aire? ¿Porqué nos ha de asfixiar, porqué nos ha de cegar, porqué nos ha de aplastar, porqué nos ha de callar?
¿Porqué morir ha de ser lo que decimos morir, y vivir sólo vivir, lo que callamos vivir? ¿Porqué el morir verdadero (lo que callamos morir) no ha de ser dulce y suave como el vivir verdadero (lo que decimos vivir?)
Yo no soy yo
Yo no soy yo. Soy este que va a mi lado sin yo verlo, que, a veces, voy a ver, y que, a veces olvido. El que calla, sereno, cuando hablo, el que perdona, dulce, cuando odio, el que pasea por donde no estoy, el que quedará en pie cuando yo muera.
Originario de Sevilla, España, Bécquer nació el 17 de febrero de 1836 siendo su padre un célebre pintor del costumbrismo sevillano quien dejó huérfano a Adolfo a los cinco años
A los nueve años quedó huérfano también de madre y salió del anterior colegio para ser acogido por su madrina de bautismo. A la edad de diecisiete años dejó a su madrina y a la buena posición que ésta le proporcionaba para viajar a Madrid en busca de fortuna a través del campo de las letras que se le daba con facilidad.
Como es conocido, no era fácil subsistir de la literatura y paradójicamente, Bécquer que deseaba encontrar fortuna lo que abundó fueron escaseces, por lo que se vio obligado a servir de escribiente en la Dirección de Bienes Nacionales, donde su habilidad para el dibujo era admirada por sus compañeros, pero fue motivo de que fuera cesado al ser sorprendido por el Director haciendo dibujos de escenas de Shakespeare. De este modo volvió Gustavo a vivir de sus artículos literarios que eran entonces de poca demanda por lo que alternó esta actividad con la elaboración de pinturas al fresco.
n 1862 llegó a vivir con Bécquer su hermano Valeriano, célebre en Sevilla por su producción pictórica pero no por eso más afortunado que Gustavo, y juntos vivieron al día uno traduciendo novelas o escribiendo artículos y el otro dibujando y pintando por destajo; mucho les costó a los hermanos salir adelante de su infortunio y con el tiempo lograron juntos una modesta estabilidad que les permitía a uno retratar por obsequio y al otro escribir una oda por entusiasmo.
Como legado para la literatura del mundo, Gustavo Adolfo Bécquer dejó sus “Rimas” a través de las cuales deja ver lo melancólico y atormentado de su vida; en el género de las leyendas escribió la célebre “Maese Pérez el Organista”, “Los ojos verdes”, “Las hojas secas” y “La rosa de pasión” entre varias otras.
el 22 de diciembre de 1870, muere Gustavo Adolfo. Curiosamente coincidiendo con un eclipse total de sol, fallece a los 34 años en Madrid, probablemente de algún tipo de enfriamiento invernal combinado con la tuberculosis que sufría desde los 21 años.
Khalil Gibran (1883-1931) fue un filósofo, escritor, poeta, ensayista y pintor libanés. Su obra refleja la espiritualidad y los principios que conducen a los niveles más altos del alma humana. Es conocido por haber creado frases inspiradoras. Su libro más conocido es «El Profeta».
Khalil Gibran (1883-1931) nació en Bsharri, en las montañas del Líbano, el 6 de enero de 1883. Vivió la mayor parte de su vida en los Estados Unidos, donde se mudó con su madre, hermano y dos hermanas en 1894. Nacido como Gibran Khalil Gibran, redujo su nombre a Khalil Gibran. En 1898 regresó al Líbano, donde completó sus estudios de árabe en el Colegio de Sabiduría de Beirut.
En 1902 regresó a los Estados Unidos. En ese momento escribió poemas y meditaciones para un periódico árabe, publicado en Boston, llamado The Emigrant. Se dedicó a la pintura y al dibujo, en un arte místico propio. Una exposición de sus primeras obras despertó el interés de Mary Haskell, directora de una escuela americana, que le ofreció un curso de arte en París. Publicó «La música» (1905) y «Las ninfas del valle» (1906).
Entre 1908 y 1910, Khalil Gibran estudió en París en la Académie Julien, donde realizó pinturas con temas místicos. Una de sus pinturas fue elegida para la Exposición de Bellas Artes. En esa época escribió «Rebellious Spirits» (1908). En 1910 regresó a Boston y ese mismo año se trasladó a Nueva York, donde reunió en torno a sí a varios escritores libaneses y sirios, que formaron una academia literaria (The Literary League), que publicó dos revistas árabes: The Arts y The Wandering.
Otros libros escritos en árabe son: «Broken Wings» (1912), «A Tear and a Smile» (1914), «The Procession» (1919) y «Storm» (1920).
A partir de 1918, Khalil Gibran comenzó a escribir algunos de sus libros en inglés, incluyendo «El loco» (1918), «El precursor» (1920), «El profeta» (1923), «Arena y espuma» (1927), «Jesús, el hijo del hombre» (1928) y «Los dioses de la tierra» (1931). Sin abandonar la pintura, ilustró sus libros y sus pinturas fueron expuestas en Boston y Nueva York.
Khalil Gibran murió de tuberculosis en Nueva York el 10 de abril de 1931. Después de su muerte, se publicaron los libros «El Peregrino», «El Jardín Secreto del Profeta» y «Curiosidades y Belleza».
Tus hijos no son tus hijos, son hijos e hijas de la vida, deseosa de sí misma.
No vienen de ti, sino a través de ti, y aunque estén contigo, no te pertenecen.
Puedes darles tu amor, pero no tus pensamientos, pues ellos tienen sus propios pensamientos.
Puedes abrigar sus cuerpos, pero no sus almas, porque ellos viven en la casa del mañana, que no puedes visitar, ni siquiera en sueños.
Puedes esforzarte en ser como ellos, pero no procures hacerles semejantes a ti, porque la vida no retrocede ni se detiene en el ayer.
Tú eres el arco del cual tus hijos, como flechas vivas, son lanzados. Deja que la inclinación, en tu mano de arquero, sea para la felicidad.
Nacido en Madrid en 1922, es uno de los poetas de la «Generación del medio siglo» cuya poesía contiene rasgos sociales basados en su experienciacomo «Niño de la guerra». Es considerado como uno de los grandes poetas contemporáneos de habla hispana. Su obra abarca temas sociales y de compromiso con el hombre, el paso del tiempo y el recuerdo, como puede observarseen su bello «Cuaderno de Nueva York» y «Alegría», dos de sus publicaciones más importantes.
Durante la guerra civil se dedicó a actividades clandestinas que motivaron su encarcelamiento en 1939. Después de ser liberado en 1942, se desempeñó en diversos oficios durante varios años, hasta radicarse en Madrid, donde inició entoncesuna larga carrera como escritor, jalonada por numerosos premios y distinciones entre los que se destacan: Premio Adonais 1947, Premio Nacional de Literatura 1953, Premio Nacional de la Crítica 1957, Premio March de Poesía en 1959, Premio Príncipe de Asturias en 1981, Premio Nacional de las Letras Españolas en 1990, Premio Reina Sofía 1995,Premio Europeo de Literatura Aristeión 1999, Premio Cervantes de las Letras 1999, Doctor Honoris Causa de la Universidad Internacional Menéndez y Pelayo 1995, Miembro de la Real Academia de la Lengua desde 1999. En 2002 fue nombrado"Doctor Honoris causa"por la Universidad de Turín. En 2002 el Ayuntamiento de Madrid le concedió la Medalla de Orode la ciudad. Falleció en diciembre 21 de 2002.
Desaliento
«No quiero que pienses», dices Tú sabes que sólo en ello puedo pensar. Pasarán los días, las noches. Tiempos vendrán sin nosotros. soles brillarán en cielos nuevos. Ecos de campana harán más misterioso el silencio. («No quiero que pienses».) Yo seguiré pensando en ello.
Quisiera hablarte de hermosas fábulas, de pensamientos luminosos, de jornadas soñadas, de flores, vientos, caricias, ternuras, gracias, secretos; pero en la boca me nacen palabras de fuego. Como llamas silenciosas me abrasan por dentro.
Debiera decirte «amor», «fantasía», «sueño».
Yo sólo pregunto cómo fue posible aquello. Seguiría, paso a paso, la huella de tu andar. Dentro de tu vida escondería la vida que muero.
«No quiero que pienses». Yo digo que no pienso en ello. (Cómo podría olvidarlo sin haberme muerto.)
El buen momento
Aquel momento que flota nos toca de su misterio. Tendremos siempre el presente roto por aquel momento.
Toca la vida sus palmas y tañe sus instrumentos. Acaso encienda su música sólo para que olvidemos.
Pero hay cosas que no mueren y otras que nunca vivieron y las hay que llenan todo nuestro universo.
Nació el 19 de diciembre de 1910 en La Habana, en cuya universidad cursó estudios de Derecho. Trabajó en un bufete de abogados y más tarde fue funcionario. Considerado por críticos y escritores como el poeta cubano más importante junto a José Martí. ... José Lezama Lima falleció el 9 de agosto de 1976 en La Habana.
Los fragmentos de la noche
Cómo aislar los fragmentos de la noche para apretar algo con las manos, como la liebre penetra en su oscuridad separando dos estrellas apoyadas en el brillo de la yerba húmeda. La noche respira en una intocable humedad, no en el centro de la esfera que vuela, y todo lo va uniendo, esquinas o fragmentos, hasta formar el irrompible tejido de la noche, sutil y completo como los dedos unidos que apenas dejan pasar el agua, como un cestillo mágico que nada vacío dentro del río. Yo quería separar mis manos de la noche, pero se oía una gran sonoridad que no se oía, como si todo mi cuerpo cayera sobre una serafina silenciosa en la esquina del templo. La noche era un reloj no para el tiempo sino para la luz, era un pulpo que era una piedra, era una tela como una pizarra llena de ojos. Yo quería rescatar la noche aislando sus fragmentos, que nada sabían de un cuerpo, de una tuba de órgano sino la sustancia que vuela desconociendo los pestañeos de la luz. Quería rescatar la respiración y se alzaba en su soledad y esplendor, hasta formar el neuma universal anterior a la aparición del hombre. La suma respirante que forma los grandes continentes de la aurora que sonríe con zancos infantiles. Yo quería rescatar los fragmentos de la noche y formaba una sustancia universal, comencé entonces a sumergir los dedos y los ojos en la noche, le soltaba todas las amarras a la barcaza. Era un combate sin término, entre lo que yo le quería quitar a la noche y lo que la noche me regalaba. El sueño, con contornos de diamante, detenía a la liebre con orejas de trébol. Momentáneamente tuve que abandonar la casa para darle paso a la noche. Qué brusquedad rompió esa continuidad, entre la noche trazando el techo, sosteniéndolo como entre dos nubes que flotaban en la oscuridad sumergida. En el comienzo que no anota los nombres, la llegada de lo diferenciado con campanillas de acero, con ojos para la profundidad de las aguas donde la noche reposaba. Como en un incendio, yo quería sacar los recuerdos de la noche, el tintineo hacia dentro del golpe mate, como cuando con la palma de la mano golpeamos la masa de pan. El sueño volvió a detener a la liebre que arañaba mis brazos con palillos de aguarrás. Riéndose, repartía por mi rostro grandes cicatrices.
Lo inaudible
Es inaudible, no podremos saber si las hojas se acumulan y suenan al encaramarse la mirona lagartija sobre la hoja. Nos roza la frente y creemos que es un pañuelo que nos está tapando los ojos. El oro caminaba después hacia la hoja y la hoja iba hacia la casa vacía del otoño, donde lo inaudible se abrazaba con lo invisible en un silencioso gesto de júbilo. Lo inaudible gustaba del vuelo de las hojas, reposaba entre el árbol inmóvil y el río de móvil memoria. Mientras lo inaudible lograba su reino, la casa oscilaba, pero su interior permanecía intocable. De pronto, una chispa se unió a lo inaudible y comenzó a arder escondido debajo del sonido facetado del espejo. La casa recuperó su movilidad y comenzó de nuevo a navegar.
De madre guatemalteca y padre argentino, nació en Barcelona en 1914.
Vivió algunos años en Argentina y pasó la adolescencia en Italia. Casada con ciudadano guatemalteco adoptó
la ciudadanía guatemalteca.
Por razones políticas debió exiliarse en México por algunos años. Sus indiscutibles méritos intelectuales le permitieron
ocupar la cátedra de Literatura Italiana en la Facultad de Filosofía y Letras de la Universidad Autónoma de México.
Asimismo, fue fundadora de la cátedra de Sociología de dicha Universidad y catedrática en la Facultad de Humanidades
de la Universidad de San Carlos de Guatemala.
En 1980 regresó de su exilio. Al poco tiempo de llegar fue secuestrada y desaparecida por el gobierno del dictador
Romeo Lucas García. Sus restos nunca fueron hallados.
Los ojos
Mínimos lagos tranquilos donde tiembla la chispa de mis pupilas y cabe todo el esplendor del día. Límpidos espejos que enciende la alegría de los colores. Ventanas abiertas ante el lento paisaje del tiempo. Lagos de lágrimas nutridos y de remotos naufragios. Nocturnos lagos dormidos habitados por los sueños, aún fulgurantes bajo los párpados cerrados.
La boca
Entre labio y labio cuánta dulzura guarda mi boca abierta al beso, estuche en que los dientes muerden vívidos frutos, cuenca que se llena de jugos intensos de ágiles vinos de agua fresca, donde la lengua leve serpiente de delicias blandamente ondula, y se anida el milagro de la palabra.
El corazón
Dicen que es del tamaño de mi puño cerrado. Pequeño, entonces, pero basta para poner en marcha todo esto. Es un obrero que trabaja bien, aunque anhele el descanso, y es un prisionero que espera vagamente escaparse.
San Juan de la Cruz, de
nombre verdadero Juan Yepes Álvarez, nació el 24 de junio del año 1542
en la población de Fontiveros, un pueblo de Ávila (España).
Era
hijo de un modesto tejedor, descendiente de ricos comerciantes de seda
de Toledo, llamado Gonzalo Yepes, que falleció cuando Juan todavía era
muy joven.
Tras la muerte de su padre, Juan se traslado junto a su
madre, una tejedora huérfana de nombre Catalina Álvarez, a Medina del Campo (Valladolid), en
donde trabajó como aprendiz de varios oficios, entre ellos carpintero y
pintor.
Juan tuvo dos hermanos mayores, Luis, fallecido con seis años, y Francisco.
Estudió en el Colegio de la Doctrina para los niños pobres.
En
el año 1563 ingresó en la Orden Carmelita de Medina del Campo con el
nombre de Juan de San Matías y un año más tarde se instruyó en la
Universidad de Salamanca, ordenándose sacerdote en 1567.
Conoció a Santa Teresa de Jesús, quien influyó notablemente en su obra y con quien colaboró para reformar la Orden. En ese momento se hizo llamar Juan de la Cruz y fundó el primer Convento de los Carmelitas Descalzos.Estuvo en prisión en la ciudad de Toledo a finales del año 1577 tras el conflicto entre Carmelitas descalzos y calzados.Durante
nueve meses estuvo recluido y allí comenzó a establecer su poesía
mística que ejemplifica desde una bella y musical disposición lírica el
contacto espiritual del poeta y el sentir creyente.
Huyó de prisión en el verano del año 1578 para regresar a sus actividades religiosas en Andalucía. EnÚbeda, provincia de Jaén, falleció a causa de unas calenturas. Era el 14 de diciembre de 1591.El religioso y poeta tenía 49 años de edad. Sus restos reposan en el Convento de los Carmelitas Descalzos de Segovia.
EL AYUNTAMIENTO DE BILBAO ENTREGA SUS PREMIOS ANUALES DE POESÍA BLAS DE OTERO - ÁNGELA FIGUERA, DE ENSAYO MIGUEL DE UNAMUNO Y DE CUENTOS DE GABRIEL ARESTI
El acto ha estado presidido por el Alcalde Juan Mari Aburto.
En la edición XIV de los Premios de Poesía Blas de Otero -
Ángela Figuera en la modalidad de castellano, el máximo galardón ha sido para
Ramón Crespo por “Cuido a una planta bella que ama y busca la sombra”.
En euskera, el premio ha sido para Ángel Erro por “Poema liburu bat irakurtzeko
jarraibideak”.
El ensayo de Jorge Fernández titulado “Espectropías” ha sido el ganador
de la categoríaen castellano de la XXIII edición del Concurso de Ensayo
Miguel de Unamuno.
En euskera, el galardón ha sido para Oskar Gaztelu,
por “Heriotzari aurrez aurre begira”.
El concurso de cuentos Gabriel Aresti ha otorgado su máximo reconocimiento
en castellano a “Velo nupcial”, de Belén Sevillano y, en euskera
a Karmele Mitxelena por “Begi urdinak”.
En la modalidad de euskera el ganador ha sido Oskar Gaztelu, de Larrabetzu, diplomado en Magisterio en Filología Vasca y Licenciado en Filología Inglesa, por “Heriotzari aurrez aurre begira”. Este ensayo, es, para el jurado, un trabajo que, aunque “no reúne las características del programa en su totalidad, ayuda a combatir el dolor y el vacío ante la muerte que todo el mundo ha sufrido”. El autor utiliza el texto como medio para sublimar la muerte, lo que puede ayudar a muchos lectores.
Clarice Lispector nació el 10 de diciembre de 1920 en el pequeño pueblo de Tchetchelnik, Ucrania, por pura casualidad ya que la familia se encontraba en medio del viaje que los llevaría a Brasil. Llegó a Brasil con dos meses y la familia se instaló en Recife. Su madre, que era paralítica, murió cuando ella tenía diez años, sin embargo Clarice recordaba una infancia feliz en la que apenas se dio cuenta de la precariedad económica en la que se encontraban. En plena adolescencia, en 1935, se mudó a Rio de Janeiro con su padre y su hermana. Estudió Derecho y empezó a colaborar con algunos periódicos y revistas. A los veintiún años publicó Cerca del corazón salvaje, una novela ya de plena madurez, que había escrito a los diecisiete años. En la Facultad conoció al que sería su esposo, el diplomático Maury Gurgel Valente, por la profesión de este residieron en Milán, Londres, París y Berna donde nació su hijo Paulo.
En septiembre de 1952 volvía a dejar Brasil, desplazándose con el marido a Washington, DC, donde permanecieron ocho años. En febrero de 1953 dio la luz a su segundo hijo, Pedro. Se separó de su marido en 1959 y regreso a Rio, donde volvió a sus colaboraciones en periódicos y revistas, y publicó su primer libro de cuentos Lazos de familia. Fue este un fecundo periodo ya que en 1961 apareció Una manzana en la oscuridad y en 1963 La pasión según G.H., su obra más emblemática.
Un incendio fortuito por una colilla mal apagada en su dormitorio en 1966 le provocó quemaduras y graves secuelas y la sumió en profundas depresiones. En esta época realizaba una crónica semanal para el Jornal do Brasil y colaboró con la revista Manchete realizando entrevistas con artistas e intelectuales. Murió en Río de Janeiro el 9 de diciembre de 1977 a los 56 años, víctima de un cáncer de ovarios, algunos meses después de publicarse su última novela La hora de la estrella.
Clarice Lispector es ya considerada una de las escritoras más importantes del siglo XX. Fue una precursora que utilizó el flujo de conciencia en sus primeros escritos mucho antes de haber leído a Wolf y Joyce, entroncó con el existencialismo pero invirtiéndolo y llenándolo de una vida primigenia que estaba exenta en los textos de Sastre, y ahondó en un estilo de una sequedad fértil y luminosa y profundamente personal.
DAME LA MANO
Dame tu mano: Voy a contarte ahora cómo he entrado en lo inexpresivo que siempre ha sido mi búsqueda ciega y secreta.
De cómo he entrado en aquello que existe entre el número uno y el número dos, de cómo he visto la línea de misterio y fuego, y que es línea subrepticia.
Entre dos notas de música existe una nota, entre dos hechos existe un hecho, entre dos granos de arena por más juntos que estén existe un intervalo de espacio,
existe un sentir que es entre el sentir en los intersticios de la materia primordial está la línea de misterio y fuego que es la respiración del mundo,
y la respiración continua del mundo es aquello que oímos y llamamos silencio.
PRECISION
LO QUE ME TRANQUILIZA ES QUE TODO LO QUE EXISTE, EXISTE CON ABSOLUTA PRECISIÓN. CUALQUIERA QUE SEA EL TAMAÑO DE LA CABEZA DE UN ALFILER, NO SE DESBORDA UNA FRACCIÓN DE MILÍMETRO MÁS ALLÁ DEL TAMAÑO DE LA CABEZA DE UN ALFILER. TODO LO QUE EXISTE ES DE GRAN PRECISIÓN. LA PENA ES QUE LA MAYOR PARTE DE LO QUE EXISTE CON ESA PRECISIÓN ES TÉCNICAMENTE INVISIBLE PARA NOSOTROS. LO BUENO ES QUE LA VERDAD NOS LLEGA COMO UN SENTIDO SECRETO DE LAS COSAS. TERMINAMOS ADIVINANDO, CONFUNDIDOS, LA PERFECCIÓN.
Tras 25 años de lucha, una enfermedad en el aparato digestivo ha ganado la batalla al poeta y cantante Xabier Lete Begaretxe (Oiartzun, 5 de abril de 1944 - Donostia, 4 de diciembre de 2010) que falleció este sábado en el Hospital Donostia.
La trayectoria poética de Lete comenzó en 1986 con un libro de poesía social, Egunetik egunera orduen gurpilean, y entre otros, publicó dos libros centrados en la figura de Xabier Lizardi. Los temas más recurrentes de sus poemarios son la muerte, Navarra, reflexiones sobre el sentido de la existencia, la patria, su visión cristiana del mundo...
Varias de sus obras han sido galardonadas. Zentzu antzaldatuen poemategia, publicado en la década de los 90, obtuvo el premio de poesía Felipe Arrese Beitia otorgado por Euskaltzaindia. Recientemente, en 2009, se le otorgó el Premio de la Crítica de poesía en euskera por su obra Egunsentiaren esku izoztuak, obra con la que también ganó el Premio Euskadi de Literatura en 2009.
Palabras de Sabier Lete:
"La piedad y la responsabilidad nos llevaba a Lourdes y a mí a desear morir juntos. Sabíamos que eso iba a ser muy difícil, porque la sociedad no tiene dispuestos tales procedimientos. Hay muchos obstáculos que impiden esa salida: éticos, deontológicos, legales y, en el caso de los creyentes, teológicos.
Llevo dentro de mí un interrogante que me provoca un gran desgarro: el ordenamiento biológico de la vida, con sus cumplimientos fácticos, ¿es eso lo que debemos aceptar con fatalidad diciendo que es mandamiento y voluntad de Dios? ¿Cómo sabemos que esa es la voluntad de Dios?
Yo creo que Dios nos hizo seres con razón y sentimiento, y que por lo tanto también somos corresponsables en las decisiones y dilucidaciones que tienen que ver con nuestra vida".
Para orar
Oración de Xabier Lete a Lourdes Iriondo, su mujer fallecida
Acógeme, amor, en el último día,
tómame en tus brazos
cuando cruce el umbral de la terrible frontera,
que de ti recoja caricias y sonrisas,
que en la claridad de las praderas de lo alto
reanudemos el amor primero
cuando la brisa limpie de arrugas nuestras frentes,
sé que tú me aguardas
no sé cómo, no sé dónde
pero que la asombrosa ventura de alguna divinidad no impida
ese reencuentro llegada la hora,
en tu palabra me fío
en aquella serenidad con la que te fuiste,
acógeme, amor, en el día de la gran cuenta,
no espero al sonar de las trompetas
no aguardo a los coros de los ángeles,
para que aquella deuda pudiera ser perdonada
y aquella culpa enjugada...
entonces sería yo tuyo para siempre
bueno para siempre, sin mancha, digno,
entonces seríamos para siempre el uno del otro,
acógeme, mi amor, en el último día,
ven hacia mí y cariñosa, sonriente,
llámame por mi nombre
para que yo sea salvado en tu gran piedad,
salvados juntos y glorificados en el amor para siempre.
siempre hay un corazón desgarrado que espera un gesto de cariño de sus semejantes
La muerte de Xalbador
Había un amigo entrañable y sensible transfigurado por las alas de la poesía, por los versos surgidos de un profundo sentimiento, un cantor que iba por las plazas aterido de soledad, que había aprendido con dolor a tejer palabras y a expresarse contenidamente desde la insobornable verdad de su ser interior.
Dónde estás hoy, en qué praderas pastor de Urepel, tú que huiste hacia las altas cumbres, hacia el mañana que perdura en el recuerdo...
Liberaste tu canción demoliendo el cerco, buscando la libertad más allá de las ataduras y los límites de tu cuerpo, convirtiendo tu último aliento en el verso más profundo, en el grito contundente de las verdades ocultas que jamás se pueden expresar. Dónde estás hoy, en qué praderas...
Sin llegar a conocer la razón de casi nada nos esforzamos por vivir con afán la vida sumergiéndonos cada noche a ciegas, con palabras que interrogan a la oscuridad.
Ay, si en las horas sombrías en lo más profundo del espíritu, existiera esa claridad de la luz, diáfana visión colmada de plenitud en la anchas tierras de felicidad antigua…
Mas perdurar es irse oscureciendo, perder el horizonte y la luminosa visión, interrogar a la vida a través del dolor obstinado, porfiando con la materia, con el espíritu, con el prójimo…
Así llega el alba, el prodigioso despuntar del día y nos sorprende distraídos y desnudos