2019/11/27

2019/11/21

Zergatik euskal fueroak?

La teoría del Pacto con el Señor vigente en los territorios vascos desde la Edad Media se elaboró bajo el doble influjo del Derecho romano y del pensamiento aristotélico de Santo Tomás de Aquino. Desarrollando el pensamiento tomista, se concluyó que lo importante era si su persona -o la dinastía real- habían sido constituidas como reales por la libre voluntad del pueblo, si se formaba parte del reino, o aceptadas por él, en caso de no formar parte de él. De hecho, Juan I conservó expresamente el carácter de Señorío, distinguiendo entre sus titulaciones la de rey de Castilla y de León y la de Señor de Bizkaia.

Paralelamente, la idea paulina del cuerpo místicocomenzó en la Baja Edad Media a descender sobre los cuerpos políticos del mundo secular, permitiendo una gran flexibilidad en la articulación de estos cuerpos entre sí y de cada uno de estos con la cabeza. La teoría delcuerpo místico-político combinada con la del Pacto de la comunidad con el Señor demostró su funcionalidad para resolver los problemas que la heterogeneidad étnica de los territorios vascos podría hacer surgir.

Sus consecuencias jurídicas, muy precisas, se plasmaron en los Fueros Generales. El Pacto con la persona del Rey (esto es, el Señor) en virtud del cual este había de acudir a jurar los Fueros -quedando sujetas sus leyes al pase foral-, se extendió a la esfera de la administración pública y, por tanto, a los asuntos fiscales: los impuestos debidos al Señor adoptaron la forma del donativo. Del mismo modo, todo acto del Señor contrario al Pacto fundador constituía un contra-fuero y debía ser obedecido, pero no cumplido.

UNA MONARQUÍA FRÁGIL La unidad territorial de la monarquía española fue frágil en los siglos XVI y XVII. Ello aseguró una larga duración a los efectos prácticos de la teoría del Pacto en los territorios vascongados;pero también en los navarros. De ahí que los monarcas españoles tuvieran interés en jurar (o respetar) los Fueros de los nuevos reinos incorporados, incluso los de aquellos conquistados por ungolpe de mano, como fue el caso de Navarra.

El sistema foral vasco fue resultado de la combinación de la historia singular de cada territorio vasco con el complejo mítico-político descrito. Las Juntas Generales de los territorios vascongados adoptaron su forma definitiva en el siglo XVI y principios del XVII. Sus células políticas eran los municipios, no estando la nobleza y el clero representados como tales. Los municipios representados en las Juntas eran las anteiglesias, de carácter predominantemente rural, y las villas, de carácter más comercial y urbano.

En el Señorío de Bizkaia, dice el historiador, político y jurista Goyo Monreal, las Juntas Generales, órgano legislativo, decidían sobre la cuantía y modalidad del ”donativo”;se convocaban una o dos veces al año, siendo llamados los representantes (o procuradores) de todas las anteiglesias de las Merindades. A partir del siglo XVII, asistieron a ellas los representantes de las villas, en número de 21.

Los requisitos que se exigían para ser procurador eran los de hidalguía y bizkainía originaria y la vecindad en el Señorío y en el municipio respectivo;desde el siglo XVII se les añadió la obligación de saber leer y escribir en castellano. Las Juntas se reunían desde el siglo XV bajo el árbol de Gernika. La representación de las anteiglesias quedó privilegiada: a principios del siglo XVIII, cuando albergaban un 40% de la población, les correspondían el 72% de los puestos. A Bilbao, con el 10% de la población, sólo le correspondía un voto.

El Gobierno General del Señorío fue, desde mediados del siglo XVII, la Diputación. Las Juntas Generales las componían el conjunto de los junteros más la Diputación, además de los síndicos y secretarios, y el corregidor. Este, representante del monarca, no tenía atribuciones legislativas, pero sí una administrativa muy importante: la de intervenir en las haciendas municipales. Velaba también para que los acuerdos de las Juntas no menoscabaran las prerrogativas reales.

NEGOCIACIONES Y ENFRENTAMIENTOS La especificidad mayor del sistema foral vasco, consecuencia de la teoría del Pacto, tenía que ver con el sistema tributario. Las provincias vascas se consideraban exentas de los tributos debidos al monarca, pues éste no era considerado como tal, sino como Señor. Las contribuciones de las Juntas a la monarquía adoptaban por ello la forma de donativos, o entregas voluntarias. Pero a título excepcional las provincias contribuían de distintos modos al erario castellano.

Los conflictos entre el rey y las Juntas se resolvían normalmente por vía de negociación;pero se producían ocasionalmente enfrentamientos que llegaban a veces a dar con los huesos de los junteros en las cárceles. En todo caso, los tributos decididos por las Juntas, con mucho los más importantes, eran los forales, esto es, los percibidos por ellas mismas de los vecinos.

El servicio militar presentaba asimismo rasgos específicos. Sólo era obligatorio en el interior de la provincia y exclusivamente con fines defensivos. Las milicias municipales quedaban a las órdenes de los respectivos alcaldes (los alardes actuales conservan el recuerdo de los antiguos desfiles);eran las Juntas Generales quienes, en nombre del rey, llamaban al país a las armas. En Bizkaia, el monarca podía convocar a las tropas sólo hasta el límite marcado por el árbol Malato;más allá, el servicio militar era voluntario. En las guerras defensivas -que en la Edad Moderna tenían siempre como enemigo a Francia- las tropas reales debían transitar exclusivamente por el itinerario fijado por el Diputado General.

Pueden distinguirse dos fases en la participación popular en las instituciones forales. Desde la derrota política de los parientes mayores en el siglo XV hasta 1650, la participación era fuerte. A partir de estas fechas disminuyó, pues se comenzó a exigir, por presiones del patriciado de las villas, un cierto número de bienes, o millares, para hacer frente a las responsabilidades en que pudiera incurrirse al ejercer los cargos;lo que fue bien visto por el Despotismo Ilustrado.

2019/11/20

2019/10/15

Revolución francesa. Independencia de los Estados Unidos

El siglo XVIII va a ser el resurgir de las nuevas ideas que partiendo de Francia se van a extender por toda Europa y América, van a promover cambios sociales tendentes a eliminar las injusticias permanentes que se daban en la mayoría de las naciones.
Los personajes de esta época que con sus ideas innovadoras dieron lugar a estos cambios se les conoce con el nombre de filósofos, que en nombre de la razón, el progreso y la verdad, criticaron el absolutismo y los privilegios de las clases sociales de la nobleza y el clero proclamando su deseo de iluminar mediante la razón. De ahí que a este siglo se le conozca como el siglo de las luces.
Todo ello va a implicar, el deseo de cambio que trajo consigo el pensamiento ilustrado acabó provocando la crisis del Antiguo Régimen, con la aparición de importantes revoluciones liberales-burguesas.

Revolucion Francesa



Lo que conocemos hoy en día como Revolución Francesa fue un fuerte movimiento político y social que tuvo sus inicios desde el año 1789 y se extendió hasta el año 1804, cuando culminó por completo con un golpe de estado impuesto por el imperio Napoleónico.
Este movimiento fue el causante de diversos encuentros violentos en toda Francia y por extensión otras partes de Europa, el encuentro tenía como protagonistas a opositores y partidarios del antiguo sistema político conocido como antiguo régimen.
La Revolución Francesa fue la encargada de ponerle un fin al absolutismo y elfeudalismo en Francia, también gracias a dicha revolución se le dio origen a un nuevo régimen político donde la burguesía era apoyada por las masas populares, convirtiéndola así en la fuerza política predominante de Francia.
Esta revolución se caracterizó por la búsqueda de derechos y libertades para la sociedad. Fue impulsada con el lema de «libertad y fraternidad» y buscó la soberanía popular.
Gracias a lo que logró la Revolución Francesa, se dio comienzo a una nueva época definida como Edad Contemporánea, la cual definió el principio de lo que conocemos como democracia moderna.

Causas de la Revolución Francesa

Aunque fueron muchas las causas por las cuales se inició la Revolución Francesa, a continuación, te daremos las más relevantes, las cuales sirvieron como detonante a uno de los mayores movimientos de la historia de Francia.

  • Una de las principales causas fue el régimen monárquico de aquella época, el cual oprimía a muchos valiéndose de un régimen político muy rígido, el cual al final sucumbió por la violenta acción tomada por la nobleza.
  • Existía una fuerte desigualdad social, económica y política entre los distintos grupos que predominaban en el país para aquel entonces.
  • La sociedad reclamaba la falta de derechos y diferentes libertades, donde influyeron las nuevas ideas de la época.
  • La gran crisis económica y financiera en la que se encontraba Francia debido al déficit presupuestario y los gastos por involucrarse en la guerra por la independencia de los Estados Unidos

Consecuencias de la Revolución Francesa

  • Fin del sistema feudal: La Revolución Francesa fue la causante de abolir todas las ramas del feudalismo esto incluía servidumbre, privilegios del clero e incluso los pocos privilegios con los cuales contaba la nobleza.
  • Declaración de nuevos derechos: Se proclamaron nuevos derechos para la sociedad, derecho a las mujeres, abolición de la esclavitud, etc.
  • Influencia de ideas nacionalistas y demócratas: Las ideas revolucionarias impuestas por la Revolución Francesa se expandieron por todo Europa e influyó de gran manera en las revoluciones de independencia en América.
  • Desarrollo de la república: Como consecuencia de la Revolución Francesa se reconoce a Francia como una república y se estableció el fin de la monarquía absoluta. Se estableció la división de poderes y se dictó la primera constitución, que luego influyó en diversas naciones 

A pesar de que fueron muchas las consecuencias causadas por la Revolución Francesa, mencionaremos algunas de las consecuencias que más resaltan en la historia de este movimiento revolucionario.

Independencia de los Estados Unidos

La independencia de Estados Unidos fue un proceso de liberación por parte de las trece colonias asentadas en el territorio norteamericano del Reino de Gran Bretaña.

Este proceso duró 8 años y comenzó en 1776, luego del cansancio por parte de las colonias norteamericanas ante la inminente presión por parte de Gran Bretaña luego de la guerra de los 7 años. Dicho proceso pasó por la declaración de la independencia el 4 de julio de 1776 y la diversas batallas que enfrentan a Gran Bretaña con las trece colonias de norteamérica.

Finalizó en el año 1783 con la firma del Tratado de París, en donde se reconoce finalmente a las trece colonias como los Estados Unidos de América, un país independiente.



Durante el siglo XVIII, las tensiones entre las trece colonias que Inglaterra tenía en la costa Este de Norteamérica y las autoridades de la metrópoli (Gran Bretaña), eran cada vez mayores debido a la subida de impuestos que se les imponía y a la nula representación de los colonos en el Parlamento británico, que era quien aprobaba dichos impuestos. Gran Bretaña se encontraba arruinada por las continuas guerras con Francia por lo que decidió aumentar los impuestos a las trece colonias que tenía en América, ya que antes no pagaban a penas. Las tensiones crecieron a partir de 1764, al imponer las autoridades británicas nuevos tributos a los colonos, como la Ley del Timbre (ley que obligaba a pagar un sello en todos los documentos que fueran oficiales) e impuestos sobre la importación de determinadas mercaderías como el té, pinturas, plomo, etc. Los colonos protestaron contra esta subida de impuestos. El acto de protesta más importante, conocido como el motín del té, tuvo lugar en la ciudad de Boston en 1773, donde un grupo de jóvenes colonos disfrazados de pieles rojas arrojó al mar el cargamento de té que llevaban algunos buques amarrados en el puerto, provocando manifestaciones callejeras por toda la ciudad. La reacción británica fue una dura represión contra los colonos y la limitación de sus libertades. Esto provocó en 1775 la sublevación de las trece colonias en lo que se conoce como guerra de la independencia (1775-1783). Las colonias tuvieron que improvisar un ejército de voluntarios al mando de George Washington, que acabaría convirtiéndose en el primer presidente de los EE.UU. La monarquía española de Carlos III de Borbón y la monarquía francesa de Luis XVI, ayudaron a las colonias en su proceso de emancipación de Gran Bretaña. Tras derrotar a los ingleses en la batalla de Yorktown (1781), firmaron la Declaración de Paz de París (1783), naciendo los Estados Unidos de América. En esta Paz fue donde España recuperó Menorca. Este movimiento de independencia es importante porque supone el triunfo en un país por primera vez de las ideas liberales, recogidas en dos documentos: - En plena guerra, representantes de las trece colonias reunidos en Filadelfia aprobaron la Declaración de Independencia (1776), adoptando, el nuevo Estadocreado, los principios de la Ilustración y el Liberalismo: el derecho de todas las personas a la libertad y la búsqueda de la felicidad y el deber de los gobernantes de respetar los derechos del pueblo. - Se aprobó la primera constitución escrita de la historia (1787). La Declaración de derechos recogida en esta constitución, consagraba la libertad, la igualdad y el derecho a la justicia de todos los ciudadanos. Establecía la división de poderes y un gobierno republicano y federal, donde el gobierno federal sería responsable de los asuntos exteriores, la defensa, las finanzas y la moneda, siendo lo demás competencia de los diferentes estados

2019/10/11

La revolución rusa

La Revolución rusa es uno de los acontecimientos más importantes del siglo XX, no solo por lo que supuso para el Imperio ruso, que pasó a ser la URSS, sino porque dio lugar al primer gobierno socialista del mundo. 
La Rusia de principios de siglo era un país atrasado económica, social y políticamente. Sin embargo, desde el punto de vista internacional, ejercía el papel de gran potencia militar. Lo era sólo en apariencia, pues su ejército se había ido quedando anticuado a lo largo de la segunda mitad del siglo XIX, como puso de relieve la Guerra de Crimea (1853-1856).
Desde el momento de su coronación en 1896, el que hubiera sido el último Zar de Rusia, Nicolás II , y el último exponente de la dinastía Romanov, obligó durante muchos años a su población a uno de los periodos más dramáticos de la historia: los absolutismos europeos. Además, con la guerra emprendida contra Japón ( guerra ruso-japonesa ) y su emperador Mutsuhito, quien recientemente había llegado al poder, lanzó una política abiertamente imperial inaugurada en 1904 que llevó a la posesión de Manchuria, una región del norte de Asia Oriental.
La derrota que siguió, causó el debilitamiento del zarismo y el crecimiento de una serie de conflictos internos cada vez más numerosos. El más importante fue el de 1905 , que pasó a la historia como el «domingo de sangre«, que es cuando la policía mató a mil personas durante una manifestación para presentar una petición al za
Se produce entonces un intento de cambio ya que entre 1906 y 1914, Rusia intenta adquirir una especie de régimen semi-representativo, donde se reconocieron parcialmente algunas libertades políticas y civiles. Sin embargo, el régimen zarista se mostró incapaz de satisfacer las crecientes demandas de campesinos y trabajadores.

La ya dramática situación se derrumbó en 1914, con el inicio de la Primera Guerra Mundial. El Imperio ruso entró en guerra junto con Francia y Gran Bretaña , contando con una rápida victoria contra Austria-Hungría aliada con Alemania . Sin embargo, después de algunos éxitos iniciales, el ejército zarista demostró la misma insuficiencia que lo había llevado a la derrota con Japón diez años antes. Mientras tanto, sin embargo, la tensión del conflicto estaba afectando no solo a los soldados en las trincheras, sino también a las masas de personas hambrientas en las ciudades.

En 1917, la condición catastrófica en que se vio afectada la economía de todo el país, la hambruna que ya había causado más de dos millones de muertes y el vertiginoso aumento de los precios de los géneros. comida, llevó a la gente de vuelta a la calle para expresar su exasperación a través de una revuelta violenta. Desde Petrogrado, las manifestaciones de la plaza del 8 y 9 de marzo de 1917 (23 y 24 de febrero según el calendario ortodoxo) se extendieron por todo el país, abrumando al régimen zarista. A los trabajadores se les había unido unidades militares rebeldes que, mientras tanto, habían establecido un soviet.

Nicolás II abdicó decretando, de hecho, el fin de la larga historia imperial de la dinastía Romanov. Después de la caída del zar, la sucesión fue asumida por un gobierno liberal provisional formado por miembros de la Duma y presidido por el aristócrata Georgij Lvov y Aleksandr Kerensky (ministro de guerra) con el objetivo de continuar la guerra y la recuperación económica del país inspirada en las estructuras occidentales.



La primera revolución rusa tuvo lugar en febrero. En el caos que se había originado, el zar Nicolás II se dio cuenta de que no poseía poder militar suficiente para combatir la revolución y vio que su única solución era abdicar. En este momento, un gobierno provisional asumía el control del país (gracias a la unión momentánea de socialistas y demócratas). El objetivo de este gobierno provisional era aportar unos cimientos sólidos para la celebración en un futuro de unas elecciones democráticas.
En un principio los soviets, que eran organizaciones formadas por obreros y sectores socialistas más radicales, dejaron al gobierno provisional realizar sus funciones, con el objetivo de asentar la revolución e impedir un posible intento de regreso zarista. Sin embargo, pronto los soviets comenzaron a separarse del gobierno provisional y se dio una lucha de poderes. El gobierno provisional poseía el parlamento y el poder del estado, mientras que los soviets tenían el apoyo de los obreros y de los crecientes sectores de izquierdas.

Esto terminó desembocando en la Revolución de octubre, en la que los trabajadores soviéticos que formaban el partido bolchevique, dirigidos por Lenin, derrocaban al gobierno provisional y constituían finalmente un gobierno socialista. La Revolución de 1917 marcaba así el inicio de una nueva etapa para la URSS, una etapa que se desarrollaría a lo largo de todo el siglo XX, hasta su disolución en el año 1991
Para comprender el nacimiento de un hecho histórico tan importante, cuyos resultados se han proyectado a lo largo de todo el siglo veinte a través de la fascinación cultural producida por el comunismo, debemos recordar el estado de atraso en el que vivió toda Rusia en la segunda mitad del Siglo XIX.
Fue precisamente para hacer frente a esta crisis social (mal abordada por el Zar Alejandro II y su sucesor Nicolás II, quien reprimió con sangre las primeras protestas) que muchos burgueses e intelectuales dieron vida a un movimiento populista con el objetivo de mejorar las condiciones de vida de las clases bajas, comenzando con la clase rural.Más tarde, muchos exponentes del movimiento populista se acercaron a las teorías políticas del marxismo, una corriente de pensamiento desarrollada en ese momento por los filósofos alemanes Karl Marx y Friedrich Engels, quienes vieron en el capitalismo y la revolución industrial un sistema de explotación de la población.
Los marxistas desconfiaban de las masas campesinas y querían más bien favorecer la formación de un vasto proletariado, con miras a ampliar la llamada lucha de clases . De esta visión, de la que Vladimir Lenin fue el principal teórico e inspiración, nació el movimiento revolucionario.
Ya en febrero de 1917, varios soldados se unieron a los rebeldes, ocupando las ciudades de Moscú y Petrogrado.
En marzo, Nicolás II renunció y toda la familia real fue arrestada antes de ser entregada al ejército. Mientras tanto, los bolcheviques, la corriente más radical del Partido de los Socialdemócratas de Rusia (POSDR) encabezada por Lenin, y los soviéticos, la organización encargada de la gestión de la clase trabajadora, aparecieron en escena.
Lenin, que se había quedado en el extranjero después de un intento fallido de revolución en 1905, regresó a su casa en abril de 1917. Fundó el Partido Comunista con una separación del POSDR y prometió a los campesinos la adquisición de tierras que una vez fueron propiedad de los terratenientes. A lo largo de la primavera de 1917, el enfrentamiento entre el gobierno interino que había tomado el lugar de la monarquía, liderado por Aleksandr Kerensky, y los soviéticos, que en cambio aparecían cada vez más populares entre los trabajadores, se exacerbó.
Después de haber frustrado el intento de golpe reaccionario por parte del general Lavr G. Kornilov , la influencia de los bolcheviques en las masas de los trabajadores y soldados se estaba ampliando, y conquistaron la mayoría en los soviets. La autoridad del gobierno provisional estaba en pedazos y los bolcheviques en ese momento constituían el único partido firmemente organizado y capaz de tomar el poder.
Entonces, a fines de octubre (del 6 al 7 de noviembre según nuestro calendario), en una reunión dramática del Comité Central del Partido, se decidió derrocar al gobierno de Kerensky . Algunos líderes estaban en contra, mientras que un líder influyente encendió la revuelta: Lev Trotsky . Provenía de la izquierda menchevique, fue elegido presidente del soviet de Petrogrado y fue la mente organizadora y militar de la insurrección que pronto cambiaría radicalmente la historia de Rusia y de toda la humanidad.
El plan de insurrección, preparado meticulosamente, funcionó a la perfección: en poco tiempo, la Guardia Roja y las tropas regulares lograron ocupar los principales puntos estratégicos de la ciudad al conquistar el Palacio de Invierno , residencia invernal del Zar y ahora sede del gobierno provisional.
Se suponía que este gesto revolucionario simbolizaba la captura de la Bastilla rusa, y en el espacio de un día los bolcheviques también tomaron el poder, obligando a Kerensky a un vuelo precipitado. La resistencia fue muy débil y toda la operación fue casi sin derramamiento de sangre, excepto por la familia Romanov que fue exterminada poco después . Al día siguiente estallaron los disturbios en Moscú y en todas las otras grandes ciudades rusas. Fue el triunfo de la llamada Revolución Rusa o Revolución de Octubre .

2019/10/10

Goya


  • Francisco de Goya nació el 1746 en España, en la provincia de Zaragoza, y tuvo cinco hermanos. Era el hijo de un artesano muy famoso y de buena reputación, y aunque su padre quería que siguiera con su negocio, él quiso pintar los cuadros que creaba en su imaginación.
  • En el colegio no destacó como estudiante, así que a los 14 años comenzó su formación como artista siendo el aprendiz de un pintor de su mismo pueblo llamado José Luzán. Con él estuvo cuatro años copiando estampas y dibujos y haciendo algún que otro encargo hasta que decidió emprender su camino por su cuenta.
  • El año 1763 se fue a Madrid para entrar en la Academia de San Fernando, pero no lo consiguió. Sí que conoció aun así a un artista llamado Francisco Bayeu que le ayudó mucho en su trayectoria como pintor y le consiguió varios trabajos importantes que hicieron que Goya destacara y se crease una buena fama como artista.
  • Se casó con Josefa Bayeu en 1773, que era la hermana de su buen amigo Francisco Bayeu. Tuvieron ocho hijos, pero sólo uno de ellos consiguió sobrevivir al parto y se convirtió en el futuro heredero de Goya.
  • El año 1790 el rey Carlos IV le convirtió en el pintor oficial de palacio. Como trabajaba para la realeza, muchos de sus cuadros se guardan en el Museo del Prado de Madrid y se han conservado intactos.
  • Cuando su esposa Josefa murió, empezó una relación con una sirvienta que tenía 35 años menos que él y que le acompañó hasta el día en que murió, que fue el 16 de abril de 1828 en Burdeos.
    En el día de hoy sus restos están enterrados en la ermita de San Antonio de la Florida

Su obra

  • En general, Goya hacía muchas series de diferentes estampas y también se dedicaba a pintar murales en las catedrales. Cuando se convirtió en el pintor de palacio, el rey y el resto de nobles que vivían allí le pedían retratos y cuadros para sus salones. Además de eso, Goya pintó una serie de cuadros denominados “Los desastres de la guerra” basados en la guerra de independencia española. Con ellos intentaba retratar cómo era la sociedad del momento y cómo era la guerra en España.
  • La mayoría de sus obras están guardadas o expuestas en el Museo del Prado de Madrid.
  • Algunas de sus obras más conocidas son: “La maja vestida” y “La maja desnuda”, “Saturno devorando a un hijo” y también “La carga de los mamelucos”, que representa de nuevo la guerra en España.

2019/09/27

Arte en el siglo XVIII

LA MUSICA DEL SIGLO DE LAS LUCES:
Mozart, Bach, Haendel, Haydn, Rameau, Vivaldi, Albinoni, Scarlatti, fueron los grandes maestros de la sinfonía, del concierto y de la ópera en esa época. Albinoni, Vivaldi, Bach, Haendel, Rameau y Domenico Scarlatti fueron contemporáneos e influyeron sobre la música de Haydn y Mozart, que fueron posteriores. Todos trabajaron patrocinados por mecenas, príncipes, duques y hombres de fortuna. Esa era la forma en esa época, para un músico de talento, de lograr posición y reconocimiento. No había leyes de propiedad intelectual ni protección a los derechos de autor, de modo que todo esto era custodiado por sus mecenas. La música de este siglo vino del barroco del siglo XVII, y Vivaldi fue el primero en hacer grandes modificaciones al concierto, dándole plano a la orquesta, que hasta entonces era sólo un acompañamiento; cambió el Concerto Solli, que era ejecutado por un instrumento principal que llevaba la melodía, y le dio participación a la orquesta completa. Bach siguió su ejemplo e incorporó una maravillosa técnica de contrapunto, y un manejo magistral de la organización de la armonía. Haydn, que era amigo personal de Mozart, capitalizó todos estos avances y los transmitió a las sucesivas generaciones. Mozart desarrolló una obra majestuosa, una fuente desbordante de creatividad, y junto con Haydn tuvieron como alumno a Beethoven, quien luego transformó su obra hacia lo romántico, el estilo que comenzó a fines del siglo y fue el principal del siglo 19.
Mejor que hablar de estilos, y clasificar la música con etiquetas, es directamente escuchar a los creadores, y sacar las propias conclusiones:


Arte neoclasico
El Neoclasicismo fue un movimiento estético y artístico, de los primeros movimientos revolucionarios que sacudieron a toda Europa a partir de mediados del siglo XVIII y hasta el siguiente siglo. Surgió con el pensamiento de oponerse a la estética ornamental y recargadísima del movimiento Barroco, al que sucedió.
Fue el final de los movimientos y representaciones artísticas de manera universales, decir, este estilo de arte afecto a todo el mundo y a todos los estilos de arte. Se podría decir que el arte neoclásico es un movimiento social, moral, filosófico e intelectual que está unido y enlazado a ideales ilustrados. Esta clase de arte se podía observar en todo el mundo pero este estilo de arte se asentó en Francia, principalmente en Paris, reemplazando a Roma como la nueva capital artística.
Se caracterizaba por fundarse con la cultura clásica y es por esto por lo que todos los artistas del neoclasicismo intentaban inspirarse con la arquitectura antigua. Además el objetivo de este tipo de arte era representar los sentimientos y el movimiento, un arte absolutamente pensado y racional, con reglas y muy sencillo y que se propone imitar al arte griego, romano y renacentista.
Antonio Canova

Huérfano de padre con 3 años, se quedaría al cuidado de su abuelo -también escultor- cuando su madre se casó por segunda vez; su abuelo no tardó en ver el talento artístico en las manos de Canova y alimentaría ese talento natural y prematuro que finalmente llevaría a Canova a convertirse en el gran maestro de la escultura neoclásica cuya influencia se prolongó en el arte del XVIII y el XIX, y hasta nuestros días.
Aunque es cierto que, en su juventud, se vio obligado a realizar diferentes trabajos para mantenerse, no tardó en ver su talento reconocido y pudo dedicarse a su arte sin ver menoscabado su éxito en ningún momento de su vida.
Trabajó para lo más granado de la sociedad de su tiempo, de su estudio salieron piezas para NapoleónCatalina la Grande de Rusia o el Papa y Canova acabó por ser considerado no sólo como el mejor escultor del neoclasicismo sino que también se han considerado sus obras como las únicas de pulido y acabado perfecto.

Arte rococo

2019/09/13

Lau haizetara (Lauaxeta)

Urdaneta

La Guerra Civil en Euskadi

Euskal industrializazioa

La Hidalgia Vasca

Gerra karlistak

Primera Guerra Carlista (1833-1839)

Las guerras carlistas convulsionaron a las cuatro provincias en el siglo XIX; supusieron la desaparición de las constituciones forales, de las que apenas quedaron unos retales, y tuvieron como reacción el fortalecimiento de la conciencia nacional. Sobre las mismas se han escrito infinidad de libros, editados en todos los países europeos que siguieron con sumo interés su desarrollo y desenlace. Si bien tuvieron como escenario todo el Estado español, no es menos cierto que el País Vasco, y fundamentalmente Navarra, jugaron un papel muy diferenciado del resto, en popularidad, objetivos, organización, desenlaces y consecuencias. Campión las resumió así:
 Para López Antón, “el carlismo en el País es la expresión de la conciencia nacional vasca en el siglo XIX; no hay otra”.
La primera guerra, llamada de los Siete Años, prendió en las cuatro provincias nada más recibirse la noticia de la muerte de Fernando VII. Un conflicto dinástico entre liberales y carlistas, se convirtió en una guerra -“nacional” la llaman muchos autores- que en el País Vasco aglutinó a la mayor parte del campesinado y clases populares, de forma generalmente voluntaria. “Por encima de hechos aislados anecdóticos -dice el historiador Tuñón de Lara- el rasgo esencial y original que tiene la guerra carlista en Euskalherria es su dimensión popular que viene a ser, ni más ni menos, que el primer signo de formación de una conciencia nacional”. También el virrey de Navarra, Marqués de las Amarillas, reconoció en 1834 ese carácter a la sublevación: “la guerra en Navarra es en el día para aquellos habitantes una guerra nacional, y con corta diferencia lo es igualmente en las tres provincias exentas”. La brutal entrada del Ejército en el País acabó por convencer a los más tibios. “Quieren hacer desaparecer estas provincias”, se leía en las proclamas rebeldes.
Los navarros nombraron a un guipuzcoano, Tomás Zumalacárregui como comandante general, tras exigirle “adhesión a los fueros y leyes de este Reyno”. Las Diputaciones carlistas de Bizkaia y Gipuzkoa acataron también su mandato. El Tío Tomás derrota repetidamente al Ejército español y se convierte en ídolo y esperanza de un país que lo sigue ciegamente. Lo que parecía más “una tribu de indios americanos que un ejército moderno”, en palabras del inglés Bacon, se convirtió en un ejército popular de 40.000 hombres.
El Gobierno tuvo que recurrir a la ayuda de Francia, Inglaterra y Portugal para contenerlo. Desde el primer momento, el Gobierno amenazó a las provincias con la abolición de los fueros: en enero de 1834 el virrey Valdés advertía a los diputados navarros que “si el Reino de Navarra daba lugar a que fuera conquistado, perdería enteramente sus fueros y privilegios… además de perder el Reino sus fueros, sería completamente asolado, hasta el extremo de reducirlo a la más absoluta nulidad”, palabras de las que Diputación levantó acta. Conforme avanzó la guerra, esta se fue centrando en las cuatro provincias y por todas las partes se fue pergeñando una salida, no tanto en torno a la cuestión dinástica cuanto a la motivación más sentida en el país: la conservación de los fueros. No faltan testigos de la guerra (ver Mackencie, Chaho, Wilkinson, Laurens, Somerville, Leguía, Lassala, Mitchell, Lataillade, Aviraneta, Viardot), que hablan claramente de la independencia como objetivo de la primera guerra carlista.
La muerte de Zumalacárregui descabezó al carlismo vasco. El final de la guerra se escenificó en el Abrazo de Vergara, donde los generales Maroto y Espartero firmaron la paz a cambio de “la confirmación de los fueros de la Provincias Vascongadas y Navarra, sin prejuicio de la unidad constitucional de la monarquía”, coletilla final que fue germen de la continuación del conflicto hasta nuestros días. El Convenio de Vergara no fue aceptado por los 13 batallones navarros y los 6 alaveses; ni por cinco de los 8 guipuzcoanos. Sólo los 8 vizcaínos lo aceptaron en su totalidad. El 25 de octubre de 1839 las Cortes confirmaron los fueros de las cuatro provincias vascas “sin perjuicio de la unidad constitucional de la Monarquía”. Nace así el Estado unitario español. En mayo de 1840, se reúnen las cuatro diputaciones para intentar una política unitaria ante el tema foral, pero mientras las tres provincias vascongadas siguen firmes en el mantenimiento de los fueros, los liberales navarros están por transar y modificarlos. La ley de Modificación de Fueros de Navarra de 1841, vendrá a ser su primer Estatuto de Autonomía. Caro Baroja afirma que “la primera guerra civil dejó a la masa popular carlista la persuasión de que había sido traicionada: que el país había quedado humillado y la fe en entredicho. Estas ideas se cultivaron con perseverancia durante las décadas siguientes, de 1840 a 1870”.



En los años siguientes se dan en las cuatro provincias diversos conatos insurreccionales que no llegan a prender en las mayorías y se reprimen con fusilamientos, deportaciones a Ultramar y estados de guerra. El golpe a los fueros navarros con la ley de 1841 y la implantación de las quintas, hace que la rebelión siga incubándose. Cuando en septiembre de 1846 se produce el levantamiento de Cataluña, se riega por las cuatro provincias una proclama firmada por la Junta Provisional Vasco-Navarra, exigiendo los fueros: “¡Vasconavarros! Al grito de LAURAC BAT álcese como un solo hombre las cuatro provincias!”. En 1848, se levantaron partidas y el brigadier Elío dirigió una proclama a los habitantes de las cuatro provincias, en la que una vez más, se reclaman los fueros. En 1849 se declaró el estado de guerra en las cuatro provincias y los rebeldes fueron embarcados a Ultramar como “miserables delincuentes”.




2019/04/30

Historia de roma

1. LOS INICIOS DE ROMA

Roma fue fundada seguramente por los etruscos hacia el siglo VIII a. C. a poca distancia del río Tíber. Los inicios de Roma corresponden a poblados situados alrededor de las siete colinas que rodean Roma.

Hasta el año 509 Roma fue gobernada por reyes. Durante este periodo el poder político de Roma estaba representado solo por las familias nobles patricias.



2. EL GOBIERNO DE LA REPÚBLICA

En el siglo VI A. c. los romanos expulsaron a los etruscos y establecieron una nueva forma de gobierno: la República. Los órganos de gobierno de Roma durante la República fueron los cónsules, los magistrados y el senado.

En esta época Roma conquistó primero Italia y después todas las tierra que rodeaban el Mar Mediterráneo.


3. LA SOCIEDAD ROMANA

En la época de la República la sociedad romana estaba dividida en patricios, plebeyos y esclavos.

-Los patricios eran el grupo con más poder (poseían la mayor parte de las tierras y de los rebaños). Constituían la nobleza romana.

-Los plebeyos formaban lo que se consideraba el pueblo o la plebe. Aunque en un principio no gozaban de derechos políticos, poco a poco los fueron ganando.

– Los esclavos no gozaban de derechos y eran considerados una propiedad.

4. EL IMPERIO ROMANO

A finales del siglo I a. C. la República entró en crisis y dio comienzo una nueva etapa conocida con el nombre del Imperio.

El Imperio Romano concentraba en manos de una sola persona todos los poderes y, aunque se mantuvo el senado, el Emperador era quien tomaba todas las decisiones.

Durante el Imperio Roma alcanzó su máxima extensión territorial y el Imperio Romano se dividió en provincias para facilitar el gobierno y la explotación económica. Cada provincia estaba bajo la autoridad de un gobernador y tenía que pagar impuestos a Roma, que era la capital del Imperio. Roma llegó a tener más de un millón de habitantes y un comercio de riquezas y de lujo.


5. OCTAVIO AUGUSTO.

El primer emperador romano fue Octavio Augusto, que era sobrino de Julio César
Extensión del Imperio Romano

Cuando Julio César fue asesinado en el año 42 a. C. Augusto tenía solo 18 años y estaba estudiando en Grecia. Se convirtió entonces en uno de los candidatos a ocupar el poder.

En el año 31 a. C., Augusto declaró la guerra a Marco Antonio, al que consideraba alejado de de sus deberes. Tras perder la batalla de Accio, Marco Antonio se suicidó y Octavio Augusto se convirtió en el único dirigente del Imperio Romano.

Durante su mandato conquistó Egipto, terminó la conquista de Hispania y sometió a Galia. Las fronteras de Roma alcanzaron los ríos Rhin y Danubio. Con él empezaba un largo periodo de paz interna.

Augusto acumuló los tres poderes: el de gobierno, el militar y el religioso. Aunque permitió que el Senado continuara debatiendo las leyes, pero él o alguien de su confianza era elegido cónsul, la persona con más poder en esta institución.

5.1. LA “EDAD DE ORO” AUGUSTEA.

Octavio Augusto era consciente de que el sistema imperial rompía con las tradiciones romanas. Por este motivo intentó legitimar su poder de diversas maneras:

– No puso trabas a la costumbre que empezó a imponerse y que le consideraba un ser divino.

– A través de escritos propios y de diversas construcciones, Augusto propagó la idea de que su gobierno era la época de mayor paz y desarrollo económico de la historia de Roma.

– Se rodeó de los principales intelectuales del momento para demostrar que también era la época de mayor explendor cultural.

El Imperio Romano en la época de Augusto necesitaba una gran capital. Por ello, Octavio Augusto realizó gran cantidad de construcciones que hicieron de Roma una ciudad que impresionara al que la visitase. Octavio Augusto restauró más de 80 templos y construyó 10 nuevos. También reformó y amplió el foro con nuevos edificios.

6. LA CONQUISTA DE HISPANIA POR LOS ROMANOS

La conquista de la Península Ibérica por parte de los romanos duró más de 200 años.

La Península Ibérica estaba poblada por tribus ïberas y celtas y, desde hacía algún tiempo mantenían contacto con griegos y fenicios. Durante la conquista de la Península Ibérica hubo frecuentes luchas con los romanos. Aunque se dio una dura resistencia (Cartago y Numancia), los romanos llegaron a conquistar toda la Península. la conquista de Hispania concluyó en el año 19 a. C., cuando el emperador Augusto venció a los pueblos del Norte, que fueron los últimos en someterse.



Octavio Augusto dividió Hispania en provincias. Las tres más importantes fueron: Bética, Lusitania y Tarraconense.

Los habitantes de Hispania adoptaron poco a poco las costumbres de los romanos y aprendieron el latín. A este hecho se le denomina romanización.


7. LAS LEGIONES ROMANAS


Las legiones garantizaban la paz del Imperio Romano y defendían la autoridad de Roma.

Hasta el siglo II a. C., el ejército de Roma se nutría de los reclutamientos anuales y de los especiales para cada campaña militar. Posteriormente se compuso de soldados profesionales, contratados a cambio de un salario.

El ejército romano estaba formado por legiones designadas por números. Los jefes supremos del ejército eran los cónsules. Para cada legión había un estado mayor formado por diez tribunos militares. Los centuriones mandaban en cada una de las sesenta centurias que componían una legión. Las legiones estaban constituídas básicamente por unidades de infantería, completadas con tropas auxiliares de arqueros y jinetes.

Los combates se realizaban a campo abierto, por ello los legionarios formaban como táctica la tortuga. Protegidos de forma eficaz contra las armas arrojadizas, espantaban al ememigo, que no sabía como actuar para deshacer el muro metálico que se le venía encima. El escorpión y el onagro eran catapultas con las que se lanzaban piedras y antorchas incendiarias a los enemigos.

* En las imágenes siguientes se puede apreciar la formación de la tortuga, al igual que en la superior, donde se aprecia a un centurión y legionarios romanos vestidos con armadura y armados con jabalinas y espadas. Haz clic sobre las imágenes para ampliar.


7.1. EL SOLDADO ROMANO

Los soldados se calzaban con sandalias de cuero que se ajustaban al tobillo y tenían suelas claveteadas. Se vestían con túnicas de diferente color, según la legión a la que pertenecían y, en invierno, protegían sus piernas con unos calzones que les llegaban hasta las rodillas.

Sobre la túnica se colocaba la armadura compuesta de placas de hierro . Un pañuelo de cuello y el casco completaban la vestimenta. Las armas reglamentarias eran: un escudo, una espada corta o daga, una lanza y una jabalina.

En caso de marcha, los legionarios acarreaban todo el equipo, junto con una capa de lana, comida, instrumentos de cocina, fogoncillo y cantimplora. El equipaje completo podía pesar 20 kilos.


7.2. EL CAMPAMENTO ROMANO

El lugar donde se establecía el ejército romano se llamaba castra. Tenía una planta cuadrada o rectangular con cuatro puertas. A partir de las entradas se trazaban dos vías principales: cardo y decumanus. Los edificios principales se situaban alrededor de la plaza o foro, que quedaba en el centro, en el lugar donde se cruzaban las dos vías indicadas. A lo largo de las calles se se plantaban las tiendas de los legionarios.



8. LA CIUDAD ROMANA

Las ciudades romanas estaban rodeadas por murallas y formadas por calles empedradas en torno a una plaza principal llamada foro, donde estaban situados los edificios principales y se encontraba ubicado el mercado de la ciudad. Allí se celebraban asambleas y mercados. En las ciudades grandes había teatros, donde el público se sentaba en semicírculo frente a un escenario en el que se representaban tragedias y comedias, y anfiteatros, donde se celebraban espectáculos sangrientos, como peleas de gladiadores. También había circos, donde tenían lugar las carreras de carros (generlmente conducidas por cuatro caballos), que era el espectáculo más popular. En los templos se rendía culto a los dioses y generalmente se construían sobre una plataforma elevada. Construyeron arcos del triunfo para recordar importantes victorias militares. Hicieron estatuas de emperadores y de dioses. El agua llegaba a las ciudades por medio de acueductos. A las casas de los ricos llegaba directamente el agua, aunque la mayoría del pueblo la recogía de las fuentes. Las termas eran baños públicos. Los romanos descubrieron los manantiales naturales con agua tibia. Los baños romanos eran populares centros sociales donde, además de recibir beneficios, como masajes, también se podía pasar el tiempo, ya que contaban con salas de juegos o biblioteca. Para curzar los ríos construyeron puentes de piedra. Las calzadas comunicaban unas ciudades con otras.


Las viviendas de las ciudades romanas eran de dos clases: domus e ínsulas. Las personas ricas tenían esclavos y vivían en casas de una sola planta llamadas domus, con un jardín central, por donde entraba la luz. Las casas estaban decoradas con bellos mosaicos, retratos y pinturas . Las familias pobres vivían en viviendas humildes, de varias plantas, llamadas ínsulas.


9. LA VIDA EN EL CAMPO

Los campesinos eran personas humildes y esclavos que trabajaban en las fincas de las familias romanas más ricas. Vivían en pequeñas casas y realizaban duros trabajos: araban la tierra con arados tirados por bueyes, segaban las cosechas con hoces de hierro y molían los cereales con molinos movidos por asnos. También fabricaban pan, aceite y vino y cuidaban el ganado. Los dueños de las fincas vivían en grandes casas de campo llamadas villas.



10. LA EDUCACIÓN EN ROMA

Durante la República las niñas patricias no iban a la escuela, sino que se quedaban en casa aprendiendo el trabajo doméstico e hilando lana. Más tarde empezaron a seguir el sistema educativo de sus hermanos varones. Los niños y niñas plebeyos asistían a la escuela, aunque algunos tenían que renunciar a ir, para mantener a su familia con su trabajo.

Las clases se impartían por las mañanas. Hasta los doce años eran mixtas, pero después, hasta los diecisiete años se separaban por sexos, aunque las niñas dejaban la escuela a los catorce años, para ayudar a las madres en las labores domésticas.

La escuela elemental era el ludus, donde el ludimagister les enseñaba a leer y a escribir. Posteriormente, de los 12 a los 16 años, se pasaba a la escuela superior donde el grammaticus los instruía en los autores griegos y latinos y les enseñaba gramática.

Los alumnos escribían con un estilo o punzón de hierro sobre tablas de madera con cera. En otras ocasiones, rollos de papiro cumplían la función de cuadernos. En estos casos un cálamo servía para escribir.. Con el tiempo, el papiro fue reemplazado por hojas fabricadas con pieles de animales. El aprendizaje del cálculo se realizaba con el ábaco o con los dedos.

Escuela romana

La vestimenta de los niños romanos consistía en túnicas que llegaban hasta las rodillas, a veces estampadas con bandas verticales de color. En invierno se revestían con una paenula, una especie de abrigo sin mangas y con capuchón y usaban zapatos con la suela claveteada, para no resbalar en el hielo o la nieve.

Los maestros solían ser personas severas, que castigaban a los alumnos desobedientes golpeándolos con una palmeta o férula. Su salario era muy bajo, por lo que necesitaban realizar también otros trabajos para poder sobrevivir.

2019/02/26

Historia de la antigua Grecia

1.- Introduccion
La antigua Grecia se localizaba en la zona oriental del Mediterráneo y fue el resultado de la fusión de distintos pueblos que vivieron en el sur de la península balcánica, la costas de Asia Menor y las islas del mar Egeo.  Todos ellos compartieron una misma lengua, religión, cultura y territorio al que llamaron Hélade. Su origen se remonta al III milenio a.C. cuando se asentaron y crecieron allí unos pueblos que alcanzaron un gran desarrollo debido al comercio marítimo, y que se organizaron en ciudades-estado independientes llamadas polis. La mitologia griega es una de las gramdes aportaciones a nuestra cultura, hoy en dia muy presente en nuestra sociedad

La geografía de la antigua Grecia condicionó su cultura y formas de vida. Su clima, igual que ahora, era templado con lluvias escasas, vientos suaves y veranos calurosos. Los ríos eran poco caudalosos y de régimen irregular. Su relieve estaba formado por cadenas montañosas muy cercanas a la costa, lo que daba como resultado un paisaje muy variado con escasas tierras de cultivo.  La población se concentraba en las estrechas franjas litorales y en algunas llanuras interiores poco extensas. La agricultura era escasa (trigo, hortalizas, vid y olivo) y poco productiva debido a la pobreza del terreno. Lo que animó desde bien pronto el desarrollo de la navegación y la emigración de la población hacia otros lugares del Mediterráneo y el mar Negro. Allí extendieron su cultura y fundaron nuevas ciudades denominadas colonias.

Geografía de la Grecia antigua





















































2. Origen de la civilización griega.

 .

a) Cretenses.

Durante el III milenio a.C. en la isla de Creta surge la civilización cretense o minoica. Alcanzó su máximo esplendor entre el 2.200 y el 1450 a.C. gracias a su dominio del mar y su riqueza basada en su próspero comercio. Esta civilización toma su nombre del rey Minos, el hijo de Zeus. Fue una sociedad muy rica debido a su agricultura, ganadería, artesanía y sobre todo el comercio. Un ejemplo de la prosperidad de esta civilización es el palacio de Cnosos, el de Festos o las ricas pinturas al fresco que decoraban estos lugares palaciegos.

b) Micénicos.

Eran conocidos también como Aqueos, se les consideraba el primer pueblo propiamente griego e irrumpieron en Creta entre el 1.500 a.C. y el 1.400 a.C. Se instalaron en la región del  Peloponeso y construyeron importantes ciudades fortaleza con palacios, templos y enterramientos. Su sociedad era jerarquizada y centralizada. Micenas fue el principal centro político, económico y militar. Esta civilización estaba organizada en pequeños estados donde los palacios-fortaleza (como Micenas o Tirinto) controlaban la actividad política, económica y militar. Su principal fuente económica era la agricultura, aunque su expansión económica por el Egeo les permitió la fundación de factorías en las islas griegas, costas de Anatolia, sur de Italia y Sicilia.
Los micénicos eran guerreros y en sus tumbas se han encontrado numerosas joyas y armas. Tomaron la mítica ciudad de Troya,  y sus hazañas y aventuras fueron contadas en poemas épicos por escritores como Homero en su Ilíada. Entre el 1.200 y el 1.100 a.C. la civilización micénica entró en crisis debido a las invasiones de un pueblo procedente del norte, los dorios. Tras ésto todos los pueblos del Egeo entraron en un periodo de decandencia y de atraso conocido como la Época Oscura (1.100 a.C. al 800 a.C.). Un periodo del que a penas existen fuentes históricas que nos permitan conocer qué pasó.

3. Etapas históricas.


Tres son la grandes etapas históricas de la Grecia antigua:
  • Época Arcaica (S. VIII a.C.-VI a.C): se caracterizó principalmente por el desarrollo de la polis, la introducción de la escritura y el inicio de la colonización comercial del Mediterráneo. Las polis eran independientes unas de otras y sólo las unía la lengua y la necesidad de defenderse de los pueblos extranjeros. Su organización social y política dependía del control que ejercían sobre las tierras y sobre el comercio. Los grandes terratenientes ocupaban los principales cargos públicos de gobierno.Durante este período se desarrollaron dos tipos de gobierno: la aristocracia y la oligarquía. A partir del año 750 a.C. Grecia inicia la colonización comercial del Mediterráneo debido al aumento de la población que hacía insuficiente la producción de alimentos y por tanto la necesidad de nuevas tierras, y el interés comercial sobre otros territorios. Las colonias proporcionaron un gran crecimiento económico a las polis de origen (metrópolis) e impulsaron el desarrollo de la artesanía y el comercio.
  • Época Clásica (S. V a.C.-IV a.C.): La prosperidad económica de este período propició el desarrollo político de las polis que a finales del siglo VI a.C. se vieron amenazadas por el Imperio persa. Todas las polis griegas dirigidas por Atenas acudieron a la defensa de las ciudades de la costas de Asia Menor dando inicio a las Guerra Médicas.Las guerras Médicas (492-449 a.C.) enfrentaron a griegos y persas. En un primer choque los griegos vencieron a los persas en la llanura de Maratón(490 a.C.), pero posteriormente los griegos fueron derrotados en la batalla de las Termópilas (480 a.C.).  Los atenienses se replegaron y poco después consiguieron derrotar definativamente a los persas en la batalla naval de Salamina. Al año siguiente los persas fueron de nuevo vencidos en Platea (479 a.C.) y posteriormente la flota griega destruyó en la costa jónica el resto del ejército Persa. La guerra concluyó definitivamente en el 448 a.C. con la paz de Calias, en la que Persia reconoció la hegemonía de Atenas en el Egeo.El siglo de Pericles. La victoria sobre los persas convirtió a Atenas en la polis más poderosa de toda la Hélade. En el 460 a.C. Pericles fue nombrado máximo dirigente de la ciudad iniciándose el período más esplendoroso de la Grecia Clásica. Desarrolló el proceso de democratización política iniciado anteriormente y activó la vida económica y cultural de la polis. Embelleció Atenas con la reconstrucción de su Acrópolis, una ciudadela en la que se encontraban el Partenón, el Erecteion, el templo de Atenea Niké o los Propileos. Y cuyas obras fueron dirigidas por Fidias, el principal arquitecto y escultor de la época. Este período también fue importante  por los grandes filósofos como Sócrates, Platón y Aristóteles, o científicos como Hipócrates que sentó las bases de la medicina.
La acrópolis de Atenas. En el año 480 a.C. los persas arrasaron este conjunto sagrado ateniense antes de ser vencidos en Salamina y Platea. Cuando Pericles llegó al gobierno de la ciudad y haciendo uso del botín de guerra, se llevó a cabo su reconstrucción. Supervisó las obras encargadas a Fidias, artífice del templo consagrado a la diosa de la ciudad: el Partenón. Pero también el templo de Atenea Niké o los Propileos. La palabra acrópolis siginifca ciudad en altura, y ya desde la época arcaica en esta parte elevada de la ciudad no se encontraban más que los santuarios atenienses pues la población prefería vivir en la llanura que rodeaba la ciudad La guerra del Pelopones (431-404 a.C.) enfrentó a Atenas y Esparta, y arrastró a sus polis aliadas correspondientes. Ambas representaban dos modelos sociales y políticos contrapuestos. Atenas y sus aliados formaron la Liga de Delos. Defendían una cultura basada en el amor al arte, la filosofía y la democracia. Esparta y sus aliados se  unieron en la Liga del Peloponeso y defendían un poder oligárquico, una sociedad aristocrática y una forma de vida por y para la guerra. El conflicto estalló por intereses comunes en los territorios del sur de Italia y Sicilia. La derrota de los atenienses en la batalla naval de Egospótamos, junto al Helesponto, dio paso a una hegemonía de Esparta. En el 404 a.C. Atenas se rindió y comenzó el gobierno de los Treinta Tiranos. Pero la peor consecuencia fue el debilitamiento del conjunto de las polis griegas que fue aprovechado por Macedonia para aumentar su expansión.
    • Época Helenística (S. IV a.C. – 30 a.C.): este debilitamiento de las polis griegas favoreció que el rey de Macedonia, Filipo II, llegara a dominarlas y a unirlas bajo un mismo reino. Macedonia, un terrotorio situado al norte de Grecia era considerado por los griegos como un pueblo bárbaro. Filipo II, admirador de la cultura griega, reorganizó su ejército y a través de varios frentes acabó conquistándola hacia el 337 a.C. En el 336 a.C. murió Filipo II y su hijo Alejandro Magno con tan sólo veinte años inició la formación de un gran imperio que abarcó desde Egipto hasta el río Indo en apenas diez años. La conquista y expansión de su imperio favoreció la difusión de la cultura y civilización griega. Fue educado por Aristóteles y admiraba también la cultura helena. Murió en Babilonia en el 323 a.C. Sus sucesores no pudieron mantener la unidad del imperio. Grecia terminó por convertirse en una provincia romana en el siglo II a.C. La consecuencia más importante de las conquistas de Alejandro fue  la expansión del helenismo, un término que definió a la civilización griega y que se caracterizó por:
      • Un florecimiento de las ciudades como centros políticos, económicos y culturales. Alejandro fundó treinta y cuatro ciudades entre las que destacaron Pérgamo o Alejandría.
      • El uso del griego como lengua oficial y culta.
      • La difusión del arte helenístico caracterizado por el movimiento y la expresión de sentimientos, y derivado del arte clásico.
      • Los grandes avances científicos en matemáticas (Arquímedes y Euclídes), astronomía (Hiparco, Aristarco de Samos), física y ciencias naturales (Herón de Alejandría, Teofrasto), geografía (Eratóstenes), medicina (Herófilo), etc.
      • Desarrollo y difusión de la cultura (biblioteca de Alejandría) y la filosofía(epicureísmo, cinismo y estoicismo.






  • 4.-Religión y arte.


    a) Religión.

    La vida cotidiana y la religión estaban muy unidas. Los griegos tenían una religión politeísta y antropomorfa, es decir, existían muchos dioses y su apariencia física y comportamiento eran semejantes a los humanos, pero a diferencia de estos, eran inmortales y tenían grandes poderes. Todas las ciudades griegas compartían esta religión politeísta y cada ciudad tenía un dios protector. Los dioses más importantes vivían en el monte Olimpo.
    Los griegos rendían culto a sus dioses de diversas maneras: sacrificios rituales u ofrendas, actos religiosos como las Panateneas de Atenas, o juegos como los celebrados en Olimpia en honor a Zeus, en los que participaban todas las polis griegas. El triunfo en los juegos honraba a la familia del atleta y a su ciudad natal. Los primeros juegos olímpicos se celebraron en el año 776 a.C.
    Los dioses intervenían constantemente en la vida de los hombres, por los que, según sus historias, los héroes eran hijos de un dios o una diosa y un mortal. Algunas de estas historias fueron recogidas por Homero en la Ilíada y en la Odisea. Estas historias tenían un gran contenido religioso que se transmitían oralmente y se llamaban mitos, y tanto el conjunto de estos mitos como la disciplina que los estudia se denomina mitología.
    Los dioses del Olimpo griego. Cuenta la mitología que primero existió el Caos, que era el gran vacío, y luego Gea, la Tierra. Del Caos nacieron las Tinieblas y la Noche. Gea engendró a Urano,  y de su unión con él nació el Océano. Por otra parte, el Día era hijo de la Noche y las Tinieblas. Gea y Urano también engendraron a Cronos y a Rea. Cronos derrotó a su padre y, para evitar que alguno de sus propios hijos tenidos con Rea lo derrocara a él, los devoró a todos. Rea, atormentada, le ocultó su hijo Zeus, quien, después de hacerle vomitar a sus hermanos, derrotó a su padre con la ayuda de estos y se convirtió en el padre de todos los dioses.

    b) Arte.

    El arte griego fue principalmente urbano. Se creó para reunir y servir a las necesidades de sus ciudadanos, ensalzar la honra de sus personas, dioses y grupos gobernantes. La transcendencia de sus aportaciones al mundo del arte han sido fundamentales para la cultura occidental, ya que otros movimientos y corrientes culturales se han basado en los conceptos y formas del arte griego.
    • Arquitectura: Sus principales construcciones fueron de carácter religioso siendo el templo el edificio más representativo. Se construía en honor a sus dioses aunque también sirvió para exaltar el poder de una ciudad o los éxitos en una batalla. Los templos no estaban destinados a albergar en su interior a gran cantidad de personas ya que las ceremonias religiosas se practicaban en el exterior. Por eso cuidaron mucho su aspecto exterior utiliando piedra calcárea o mármol en sustitución de la madera o el ladrillo, aplicando correcciones ópticas o incluso pintando muchas de sus partes. Los techos y tejados eran de madera. Y las plantas generalmente rectangulares. En cuanto las técnicas constructivas utilizaron el dintel y la columna desde época micénica. Y consecuencia de su evolución (ver fichas de arte griego) se combinaron las partes del edificio con los distintos órdenes en las columnas y capiteles dando lugar a tres formas u órdenes constructivos bien diferenciados:
      • Dórico. Era el más antiguo y el más austero. Sus restos conservados son escasos debido a que los primeros se construyeron en madera y adobe. A medida que se fue adoptando la piedra como material principal el tamaño y perdurabilidad aumentó. A parir del siglo VII a.C. aparece en la Grecia continental. Muy utilizado en época arcaica y clásica. Destacamos el templo de Paestum (en el sur de Italia), el Partenón de Atenas (Acrópolis de Atenas) o el templo de Zeus en Olimpia.
      • Jónico. Se inicia hacia el siglo VI a.C. en las costas de Asia Menor. Posee una mayor riqueza decorativa y se desarrolla también en época clásica. Sus ejemplos más importantes son el templo de Atenea Niké, el Erecteion o el interior del Partenón (todos en la Acrópolis de Atenas) o el templo de Hera en la isla de Samos.
      • Corintio. A partir del siglo IV a.C. con las conquistas de Alejandro y el desarrollo del helenismo la arquitectura griega se difundió por Asia y África adoptando elementos más elegantes y ornamentados. Ejemplos de este periodo son el templo de Zeus o la linterna de Lísícrates, ambos en la ciudad de Atenas.
    Además de los templos, otras construcciones públicas importantes fueron los estadios para la carrera de atletas, los gimnasios y las palestras para ejercitar el cuerpo, los hipódromos para las carreras de caballos, los odeones para las audiciones musicales, el ágora como lugar de reunión o plaza pública de la ciudad y  los  teatros. Esta última es una de las edificaciones más espectaculares de las civilizaciones antiguas y la primera construcción realizada en occidente destinada a espectáculos. Normalmente cada ciudad disponía de uno.  Se utilizaban para reuniones públicas o interpretación de obras clásicas. Se construían al aire libre aprovechando el desnivel de una colina, tenía una forma semicircular y poseían una gran acústica. Algunos de ellos tenían capacidad para más de 15.000 espectadores. Un buen ejemplo es el teatro de Epidauro (en la Península del Peloponeso en Grecia) o el  teatro de Delfos.


    • Escultura. La representación de la figura humana fue una constante entre los artistas griegos. Éstos, a través de las diferentes épocas en las que se divide su evolución, superaron la rigidez inicial de influencia egipcia hasta llegar al dominio de la naturalidad y el movimiento es sus esculturas. Los materiales también evolucionaron desde la madera y la arcilla, hasta la utilización del mármol y el bronce. Muchas de ellas se pintaron para darles mayor realismo (ver fichas de arte griego). Podemos distinguir también tres periodos históricos en su evolución artística: arcaico, clásico y helenístico.
      • Arcaico. Iría desde el s. VII a.C. al VI a.C., y sus representaciones se caracterizaron por tener un estilo frontal y rígido (hieratismo). Las esculturas representaban jóvenes desnudos (kouros o kouroi) o jóvenes doncellas vestidas (korai o koré). Eran figuras rígidas, con los brazos pegados al cuerpo y con un tratamiento del mismo poco natural. Solían estar pintadas. Algunos ejemplos de este periodo son la dama de Auxerre (museo del Louvre de París), koré con Peplo (museo de la Acrópolis de Atenas), kouros de Anabyssos (Museo Nacional de Atenas) o el Moscóforo (museo de la Acrópolis de Atenas).
      • Clásico. Abarca del siglo VI al IV a.C. y se caracterizó por la búsqueda constante de la belleza, la naturalidad, el equilibrio y el movimiento. Esto llevó a los griegos a buscar la proporción de la figura humana y a proponer el modelo escultórico ideal del cuerpo humano. Las esculturas eran preferentemente masculinas y buscaron la armonía en las proporciones y la serenidad de la expresión. El artista más destacado fue Fidias. Algunos de los ejemplos más representativos son los relieves de Fidias en la Acrópolis, el Discóbolo de Mirón, el Doríforo de Policleto o el Hermes de Praxíteles.
      • Helenístico. Se extiende entre los siglos IV a. C. a II a.C. y se caracterizó por la acentuación del realismo (dramatismo), tanto en el movimiento como en la expresión. Sus temas serán variados (niños, ancianos y grupos) y también los materiales (mármol y bronce). Buenos ejemplos de este período son la Venus de Milo, la Victoria de Samotracia o el Laocoonte y sus hijos.
    Esquema de la escultura griega


    5. La cultura griega.

    La civilización griega se ha convertido, junto con la romana, en la base de nuestra cultura occidental. Y su herencia se encuentra muy presente entre nosotros. Los griegos nos han transmitido un ideal de belleza basado en la armonía de las proporciones matemáticas tomando al hombre como la medida de todas las cosas. Fueron los primeros en buscar respuestas de todo lo que ignoraban a partir de la razón, y nos aportaron disciplinas como:
    • La ciencia. Desde época arcaica fueron los los primeros que intentaron explicar el cosmos a través de la razón, desarrollando ciencias como la Astronomía, la Física y la Matemática. Destacaron sabios como Tales de Mileto (filósofo, físico y matemático), Pitágoras (filósofo y matemático) o Anaximandro (filósofo y geógrafo). Ya en época clásica destacaron el filósofo Platón que introdujo la Música, la Matemática y la Geografía como disciplinas básicas. O Alcmeón e Hipócrates que desarrollaron la Medicina (juramento hipocrático). Finalmente en época helenística destacaron inventores e ingenieros como Arquímedes (tornillo de Arquímedes o su principio de densidad de un cuerpo) y Aristarco de Samos que elaboró una teoría que colocaba el Sol en el centro del Universo.
    • La filosofía. Fueron también de la región de Asia Menor los primeros filósofos que separaron mito y naturaleza y se preguntaron por el principio de lo que existe. Los mejores ejemplos fueron Sócrates (defensor de las verdades absolutas), Platón (separó el mundo ideal del terrenal) o Aristóteles (explicó el mundo a través de la lógica).
    • La literatura. Los griegos crearon el teatro como género literario con representantes de la talla de Sófocles o Esquilo (tragedias) y Aristófanes (sátira). En poesía destacó Homero y su obra la Ilíada y la Odisea que recogieron la religión y costumbres del pueblo griego. Y la historia, desarrollada por autores como Heródoto (considerado el padre de la historia por su obra Los nueve libros de historia) y Tucídides (Historia de la Guerra del Peloponeso es el que mejor describió las relaciones entre Atenas y Esparta).